
Cirugía de Hipermetropía
Los hipermétropes ven peor de cerca que de lejos. Es el defecto opuesto a la miopía. Cuantas más dioptrías de error refractivo tiene un ojo hipermétrope, más desenfocadas verá las imágenes cuando no lleve las gafas.
La hipermetropía tradicionalmente se ha corregido con gafas y lentes de contacto. Desde hace años otra opción de tratamiento es la cirugía refractiva con láser. La más utilizada, por su probada seguridad y eficacia, es la técnica denominada LASIK. Consiste en la modificación de la forma de la córnea para cambiar la refracción o graduación total del ojo. Se separa cuidadosamente el epitelio (capa fina superficial) de la cornea, con el extremadamente preciso láser de femtosegundo, para luego aplicar el láser excimer que modela la cornea para corregir las dioptrías deseadas. Por último se recubre la zona tratada con el epitelio, antes separado, y sin necesidad de puntos para restablecer la superficie ocular normal. A las pocos horas el resultado es evidente, resultado que mejora definitivamente al día siguiente. Estabilizándose la visión de forma general durante las primeras semanas.
